CUARTA SESIÓN DE ANIMACIÓN
SOCIOCULTURAL, día 25 de septiembre
Hoy ha sido nuestra cuarta clase
de animación sociocultural y como hicimos en la anterior clase, nos hemos
puesto en círculo para tratar las ideas principales del texto “pedagogía del
oprimido” de Paolo Freire, esta forma de
dar clase es más entretenida y participativa, ya que el texto se explica entre
todo el alumnado y profesor, y no es la típica clase narrada por el profesor en
la que él hablo y el alumnado escucha donde la mayoría de estudiantes
desconectan a mitad de clase.
Las oraciones que más nos han
llamado la atención del texto y que pensamos que son las que mejor explican las
ideas principales que Carles quería destacar de este autor son:
-
“la narración, cuyo sujeto es el educador, conduce a los educandos a la
memorización mecánica del contenido narrado. Más aún el contenido los
transforma en “vasijas”, en recipientes que deben ser “llenados” por el
educador. Cuando más vaya llenando los recipientes con sus “depósitos”, tanto
mejor educador será”. Cuanto más se dejen llenar dócilmente, tanto mejor
educandos será.”
De aquí, sacamos varias
conclusiones: la primera fue una crítica al sistema educativo que no de ahora,
ya que este libro fue escrito y publicado hace más de 50 años. Esta crítica que
recibe el sistema educativo que actualmente seguimos es que el profesor hace
una narración durante su clase y el resto de alumnos se dedican a escribir lo
que pueden captar, para luego estudiarlo y “vomitarlo” durante una prueba, que
se hace normalmente escrita y que después de esta prueba o examen los alumnos
recuerdan un porcentaje muy bajo del temario antes dado en clase. Otras de las
conclusiones o comentarios acerca de este párrafo fue la de que para exista un
aprendizaje deben de querer uno enseñar (el profesor) y otro aprender (el
alumnado) ya que si alguno de los dos no está en disposición de hacerlo no se
dará ese aprendizaje.
-
“En esta visión distorsionada de la educación,
no existe creatividad alguna, no existe transformación, ni saber”.
De este apartado estuvimos
comentando de que siempre estudiamos de la misma forma y que no hay cabida para
ser creativos, porque solo fomentan la memoria sin hacer caso a otras
habilidades o talentos que podrían desarrollar en caso de que las clases fueran
más prácticas.
-
“En verdad, lo que pretenden los opresores es
transformar la mentalidad de los oprimidos y no la situación que los oprime. A
fin de lograr una mejor adaptación a la situación que, a la vez permita una
mejor forma de dominación ”.
Aquí Freire ya lo explica
bastante claro, diferencia entre opresores y oprimidos. En este apartado se
abrió un debate en clase acerca de si oprimidos están oprimidos porque quieren,
por pura comodidad, o por miedo a perder más de lo que tienen, ya que cuando
tienen el conocimiento suficiente para poder juzgar las situaciones con
criterio propio pueden elegir el luchar para cambiar las cosas o quedarse como
están por miedo a perder más de lo que puedan ganar. Esto también hace
referencia a otro párrafo que dice así: “tarde o temprano, los propios
“depósitos” pueden provocar enfrentamientos con la realidad en movimiento y
despertar a los educandos, hasta entonces pasivos contra su “domesticación” ”.
Aquí Freire hace referencia a que cuanto más conocimiento tienes menos
manipulable te vuelves, por eso a los opresores no les conviene que la gente
adquiera más conocimiento, porque saben que pueden haber revelaciones y haber
un cambio de roles, aunque ahora se vea muy lejano que esto ocurra. Otra compañera también dijo que un oprimido
no puede cambiar su estatus o su rol ya que esto no viene de ahora, sino ya de
antiguamente cuando ya existían los estatus, donde la gente que tenía dinero y
tierras tenía el poder y tenía esclavos y/o trabajadores que trabajaban sus
tierras por un sueldo miserable.
Como conclusión podemos decir que
en animación sociocultural va ligado a educación y a cultura.
La educación tiene dos puntos de vista: el primero como herramienta de opresión que puede dar poder a las personas para que piensen por sí mismas. Es concebida como una herramienta de cambio para realizar un cambio social. El otro punto de vista es como actualmente lo vemos, como una inversión para en un futuro mejorar el mercado laboral.
La educación tiene dos puntos de vista: el primero como herramienta de opresión que puede dar poder a las personas para que piensen por sí mismas. Es concebida como una herramienta de cambio para realizar un cambio social. El otro punto de vista es como actualmente lo vemos, como una inversión para en un futuro mejorar el mercado laboral.
Después de este debate, nos
colocamos como una clase normal (todo el alumnado mirando al profesor en
dirección a la pizarra), ya que Carles iba a explicar el concepto de cultura
poniendo varios ejemplos en la pizarra:
-
Ana tiene mucha cultura: entendida la cultura
como “saber o conocimiento”, este tipo de cultura diferencia entre personas
cultas (que han aprendido mucho) o personas incultas (no han aprendido mucho).
Este es el concepto humanista.
-
La cultura mexicana es…: entendida como las
costumbres, comida, valores, formas de divertirse de un territorio (concepto
antropológico). Desde este punto de vista todos tenemos una cultura (menos las
personas salvajes), ya que la cultura es entendida como compartir cosas con
otras personas.
-
Cultura de la juventud: cosas que comparten los
jóvenes del mundo (música, deporte, comida, etc.)
-
Pepa tiene afición a la cultura: pintar, teatro,
museo, actividades culturales.
La animación sociocultural no
habla de cultura en concepción humanista. Las actividades culturales modifican
la cultura en sentido antropológico. La música influye en la forma de pensar y
de actuar de las personas (canciones machistas).
27 de septiembre, NUEVA CLASE, RETORNO AL TEATRO
Hoy hemos dejado la clase teórica
y comentar textos para otro día, hoy tocaba de nuevo teatro. Al llegar hemos
vuelto a mover las mesas y las sillas para conseguir una clase más favorable
para poder trabajar en grupo y poder movernos con más tranquilidad. Para entrar
en calor hemos vuelto a jugar al juego de pasar la energía entre compañeros y
después hemos metido un juego nuevo, también en circulo donde decíamos “JIA”
para pasar la energía solo en un sentido y posteriormente hemos metido nuevas “pruebas”,
como hacer una sentadilla y decir “UJA” para cambiar el sentido de la energía,
decir “FRISBI” y lanzar el frisbi imaginario en tres direcciones mientras los
demás mirábamos la dirección del objeto mientras decíamos “OOOOOOH” y también
otra prueba donde uno decía “BONSAI” y todos teníamos que juntar las manos y
abrirlas y construir una frase en común todos juntos, diciendo de forma
ordenada una palabra cada uno, y al acabar decir de nuevo “bonsai” y seguir pasando
la energía. Con estos juegos se busca perder un poco la vergüenza que tenemos
entre nosotros. Al acabar el juego, hemos realizado otro en circulo también,
donde teníamos que mantener contacto visual con una persona y entrecruzarse con
ella sin quitar la vista de esa persona. Una vez que intercambiábamos el lugar,
esa persona buscaba a otra y volvía a salir, aunque ha sido un poco más fracaso
al perdernos y no encontrar ninguna mirada, ya que intentábamos estar atentos a
otras personas, por lo que ha acabado pronto ese ejercicio.
Después nos hemos esparcido por
el aula, de forma desordenada y hemos comenzado a andar, sin cruzar las miradas
hasta que el profesor nos hacía detenernos y mirar alrededor y mantener la
mirada con la persona que más próxima estaba de nosotros. Al rato, otro juego andando
por el aula de forma desordenada en que el profesor iba diciendo un número y
nosotros teníamos que decir lo que significaba cada número, por ejemplo, cuando
nuestro profesor decía “UNO” nosotros teníamos que hacer como que parábamos un
taxi, cuando decía “DOS” nosotros decíamos “pos’ va a ser que no”, cuando decía
“TRES” nosotros teníamos que poner cara de pena y decir “jo no he sigut” y
cuando decía “CUATRO” nosotros decíamos “xe, corre!”. Iba alternando los números
por lo que era muy divertido si nos confundíamos o si lo hacía muy rápido.
Una vez perdida la vergüenza teníamos
que seguir andando por el aula, y cuando el profesor nos decía que paráramos teníamos
que buscar una pareja y saludarla como si hiciera 5 horas que la habíamos visto
y hablar un poco, después volver a andar y cuando nos dijera de nuevo parar,
encontrar una nueva pareja y que esta vez, en vez de 5 horas fueran 5 días,
luego 5 años y luego 50 años, y así ver como cambiaban los saludos, siendo más
emotivos y alegres, contando muchas batallitas, inventándonos historias muy
divertidas entre compañeros, agradeciendo cambiar cada vez de pareja, con gente
nueva.
Al acabar este ejercicio nos
hemos puesto en parejas mezcladas y nos hemos puesto uno delante del otro, y
como un espejo, teníamos que imitar a la persona de delante, siguiendo la
música. Poco a poco íbamos cambiando el roll de imitar al otro, primero dirigía
uno y después la otra persona a la par de la música y aprovechando este
ejercicio hemos realizado relajación. Nos hemos esparcido por el aula, hemos
cerrado los ojos repartiendo el peso de nuestro cuerpo en las dos piernas y el
profesor iba dirigiendo un poco nuestros pensamientos, alejando los
pensamientos negativos y pensando simplemente en los buenos, las sensaciones,
las palabras agradables que hemos tenido durante el día… para así calmarnos un
poco.
Posteriormente hemos vuelto a hacer
parejas nuevas, donde uno hacía de cámara y el otro hacía de fotógrafo. Primero
teníamos que fotografiar 3 cosas que nos gustaran en el aula, mientras que el
fotógrafo tenía que llevar al que hacía de cámara de la mano por ir con los
ojos cerrados y cuando le apretaran la mano tenía que abrir los ojos, como haciendo
la fotografía. Después cambiábamos el rol, el fotógrafo era la cámara y la
cámara el fotógrafo pero esta vez, tenía que hacer tres fotos a lo que menos le
gustara del aula. Al acabar de fotografiar, los que habían hecho fotos “buenas”
se ponían a un lado de la sala y los que habían hecho fotos “malas” al lado
opuesto y estos grupos se dividían en dos ya que nuestra clase es bastante
grande en número. Los pequeños grupos tenían que comentar sus fotos y elegir un
concepto común, como por ejemplo la libertad, y después representarlo
públicamente delante de todos para que ellos intentaran averiguar lo que
representaba el grupo. Era bastante emocionante ver como cada grupo
representaba la palabra y como pensábamos nosotros mismos como lo habríamos
representado, o ver como representábamos de manera distinta la misma palabra ya
que dos grupos han coincidido.
Para finalizar hemos hecho de
nuevo un círculo para poner en común lo que nos había parecido la clase,
nuestros sentimientos y además comentar qué no nos gustaba de la clase, aunque todos
hemos coincidido en que es una forma distinta de trabajar y normalmente solemos
disfrutar mucho de esta forma de trabajo, aunque a veces no nos sentimos muy
animados para hacerlo.
Pensamos que estas clases son
como una salida de la rutina y una forma de mantenernos “unidos”, de conocernos
entre nosotros, ya que este año es un año de cambios y de compañeros nuevos y
tenemos que salir un poco de nuestra rutina, de nuestra zona de confort, y así
nos ayuda a perder la vergüenza delante de gente que no conocemos o que
conocemos muy poco.
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